Otra edición de VIVA EL CHAMAMÉ se presentó en Buenos Aires

Otra edición de VIVA EL CHAMAMÉ se presentó en Buenos Aires

 Se ha presentado una nueva edición del espectáculo VIVA EL CHAMAMÉ en el Luna Park, con Ramona Galarza, Mario Bofill, Antonio Tarragó Ros, Las Hermanas Vera, el grupo Amandayé y Los de Imaguaré, entre tantos otros artistas. La grilla abundante obligó a acelerar la participación en el escenario, limitándola a tres y cuatros temas para cada uno. Juan y Ernestito Montiel recibieron la conducción oficial de manos del Cuarteto Santa Ana.

A mitad del espectáculo se anunció la vuelta del Club Deportivo Mandiyú al torneo nacional e hinchas enviados por la dirigencia entregaron un carné de socio vitalicio a Nito Artaza, quien arengó al público al grito de ¡Mandiyú!. También se realizó un homenaje a Sebastián Crismanich por su medalla de oro en las olimpíadas de este año.

Tras siete años alejado del escenario, Luis Landriscina volvió a deleitar al público con sus palabras.

El final estuvo a cargo de Antonio Tarragó Ros, quien tocó con los 100 acordeonistas que lo acompañan. Hacia las 2 de la madrugada los máximos exponentes del chamamé se unieron en una sola voz para cantar Kilómetro 11 en un sentido tributo a Corrientes.  Se ha presentado una nueva edición del espectáculo VIVA EL CHAMAMÉ en el Luna Park, con Ramona Galarza, Mario Bofill, Antonio Tarragó Ros, Las Hermanas Vera, el grupo Amandayé y Los de Imaguaré, entre tantos otros artistas. La grilla abundante obligó a acelerar la participación en el escenario, limitándola a tres y cuatros temas para cada uno. Juan y Ernestito Montiel recibieron la conducción oficial de manos del Cuarteto Santa Ana.

A mitad del espectáculo se anunció la vuelta del Club Deportivo Mandiyú al torneo nacional e hinchas enviados por la dirigencia entregaron un carné de socio vitalicio a Nito Artaza, quien arengó al público al grito de ¡Mandiyú!. También se realizó un homenaje a Sebastián Crismanich por su medalla de oro  en las olimpíadas de este año.

Tras siete años alejado del escenario, Luis Landriscina volvió a deleitar al público con sus palabras. 

El final estuvo a cargo de Antonio Tarragó Ros, quien tocó con los 100 acordeonistas que lo acompañan. Hacia las 2 de la madrugada los máximos exponentes del chamamé se unieron en una sola voz para cantar Kilómetro 11 en un sentido tributo a Corrientes. 

 

Sobre fotos y textos de Martín Romero Enviado Especial de ÉPOCA